Mandala 1

Mandala #1 es una variedad regular resultado del cruce entre una sativa sudafricana de excelente vigor y resistencia, y un cruce entre una índica procedente de Nueva Zelanda con una cepa sativa procedente del norte de la India. El resultado es una planta que se caracteriza por mostrar su parte sativa durante el crecimiento y la pre-floración, aunque cuando comienza a florecer se puede apreciar con claridad, como los cogollos lucen como si de una cepa índica se tratara. Por este motivo es perfecta para su cultivo en exterior e interior y en cualquier medio, además de para realizar esquejes y seleccionar sus dos fenotipos, al reaccionar muy bien a este tipo de técnica de clonación. El producto final que ofrece destaca por ser de gran volumen, producir coloraciones violáceas y por la densa capa de tricomas que desarrolla.

Cultivo de semillas Mandala #1 de Mandala Seeds

Cultivando Mandala #1 en interior

El cultivo de esta variedad lo puede realizar cualquier persona, independientemente de su nivel y experiencia, obviamente los más experimentados podrán obtener suculentas cosechas de más de 450 g, aunque los más inexpertos podrán superar los 350 g sin realizar demasiados esfuerzos. Es importante recalcar que su crecimiento es bastante bueno, por lo que con tan solo 20 días de periodo vegetativo, podemos dar comienzo con la floración y obtener al final del cultivo plantas en torno al 1 o 1,50 m. de altura. Lo ideal para conseguir ejemplares bien desarrollados y productivos, es cultivar 9 cepas por m2, aunque para ello tengamos que cultivar más semillas y eliminar los machos, ya que es una variedad regular. Otra de las opciones que nos permite es la de realizar tanto un SOG, como un SROG, dado que desarrolla una gran flor central predominante y a su mismo tiempo forma una distancia internodal ideal para el enmallado. La cosecha se puede realizar a partir del días 55 de floración.

Cultivando Mandala #1 en exterior

Hay que resaltar que el cultivo Mandala #1 en exterior es muy sencillo y además es en el que se pueden obtener los mejores resultados en cuanto a producción y calidad en la cosecha. Obviamente la producción no la podemos comparar individualmente con la que se obtiene en su cultivo de interior, pero sí que es cierto, que es una de las cepas de floración temprana más productivas del mercado, ya que cultivada en suelo, puede superar el kilo de marihuana en seco. Su cría se ha realizado con la intención de poder obtener buenos resultados en zonas donde los veranos son cortos y la llegada del mal tiempo es temprana, por ello si vives en el norte, está es tu variedad ideal. En cuanto a su desarrollo hay que resaltar que se adapta muy bien a cualquier escenario, por lo que puede ofrecer buenos resultados aún cultivándose en suelos pobres y arcillosos. Su tamaño puede superar los 2 metros al final de su cultivo y está lista para la cosecha de mitad a finales de septiembre.

Efectos y aromas de Mandala #1

Dependiendo del fenotipo, el efecto puede variar hacia el lado más sativo, provocando cierta sensación de euforia y actividad cerebral o hacia su lado más índico, provocando una relajación física de intensidad media. Este fenotipo es el de carácter más medicinal, ya que genera niveles de CBG muy interesantes (1%). El aroma y sabor que ofrece también puede variar, aunque por lo general está predominado por una combinación de notas dulces muy especial, la cual viene acompañada por un toque ácido y fresco que recuerda a manzana y a menta.

¿Qué fenotipos ofrece de Mandala #1?

Mandala #1 a pesar de ser el resultado de un excelente programa de cría y estabilización, presenta dos fenotipos un tanto diferentes. Por un lado podemos encontrar el más sativo, el cual se desarrolla de forma vigorosa formando ramas de buen tamaño que llegan casi a la altura del ápice. Este además suele general una cierta coloración rosácea y/o violácea que le da un toque exótico muy llamativo y un aroma más punzante y mentolado. El otro fenotipo es claramente más índico al desarrollar una estructura más compacta, con ramas más cortas y un color verde más intenso. Este fenotipo permite el cultivo de más ejemplares por m2 y produce aromas más dulces.

• Sativa/Índica: 50/50%
• Floración: interior 55-60 días. Exterior de mediados a finales de septiembre.
• Altura: interior 0,60-1,20 m. Exterior 1,50-2,30 m.